Me fluyen las ideas con tanta rapidez que no me da tiempo a expresarlas...De ahí que los destinatarios de mis cartas no encuentren en ellas ni rastro de ideas.
A veces vale más la pena tener mil ideas en mente que no expresar cada una de ellas :)
Las palabras se tornan superfluas.
A veces vale más la pena tener mil ideas en mente que no expresar cada una de ellas :)
ResponderEliminar